En un emotivo acto de carácter histórico para la institución, la máxima autoridad de la Regional Tucumán tomó la conducción de esta prestigiosa Casa de Altos Estudios asumiendo el segundo mandato. Autoridades del Gobierno provincial, de las demás universidades de Tucumán, miembros de las diferentes regionales y del rectorado de la UTN se hicieron presentes.
Orquesta de Cámara Pláate Ensamble Music, compuesta por 14 músicos, conducida por el reconocido chelista, compositor tucumano Gustavo Pláate
El Aula Magna del Centro Cultural "Ing. Juan Carlos Recalcatti" colmada con funcionarios públicos y miembros del Rectorado en la primera fila
El Ing. Walter Fabián Soria jura como máxima autoridad de la Regional Tucumán para el periodo 2011 - 2015
El nuevo gabinete para el periodo 2011 - 2015
Les agradezco a todas las autoridades y la comunidad universitaria su presencia en este acto. Como siempre, interpreto estas presencias no como un reconocimiento personal sino como la evidencia concreta de la inserción social y valoración institucional que hoy caracteriza a nuestra Facultad Regional Tucumán de la Universidad Tecnológica Nacional.
Hoy somos un actor principal en el sistema de Educación Superior en nuestra provincia y en el NOA. Recuperamos prestigio institucional e inspiramos respeto y confianza.
Precisamente éste fue uno de los objetivos que nos propusimos hace cuatro años al iniciar mi primer período en el decanato de nuestra regional y, al respecto, podemos afirmar que fue mucho lo que hicimos y que tenemos mucho por hacer.
Seguramente ese es el sentido y claro mensaje de los claustros universitarios al encomendarme conducir la gestión de gobierno por otro período. Valoran todo lo realizado pero el mandato recibido es en función del porvenir y de lo mucho que tenemos por hacer.
Como ustedes saben, Winston Churchill ejerció el cargo de Primer Ministro inglés durante todo el transcurso de la segunda guerra mundial. El día de la victoria aliada, se dirigió al Parlamento y en su ingreso fue objeto de la más tumultuosa ovación que registra la historia de la asamblea. Pero, a pesar de la enorme popularidad alcanzada durante la guerra, dos meses después el voto de los ingleses lo depuso de su cargo.
Es decir ganó la guerra y perdió las elecciones.
¿Fue por ingratitud o simplemente porque no interpretó las aspiraciones de progreso futuro de la sociedad inglesa?
A la hora de elegir siempre miramos hacia adelante.
Lo pasado es importante para la construcción de confianza en base al trabajo y esfuerzo realizado, hecho no menor en los tiempos que corren, pero lo relevante es la noción de construir un futuro en el cual estemos todos incluidos y en donde nos sintamos parte.
Fui electo para este segundo período por las realizaciones concretadas, porque demostramos saber hacer, además de poseer la voluntad y aptitud para superar los obstáculos y sobre todo porque soy depositario de la confianza de nuestra comunidad universitaria para conducir esa construcción de un futuro compartido en una gestión de gobierno democrática, pluralista y republicana.
Asumo con plena responsabilidad el voto de confianza, manifestando que el amplio resultado electoral me obliga más y no menos en el ejercicio de mis funciones.
Es de conocimiento público mi programa de gobierno por lo que no me detendré en las cuestiones particulares del QUÉ, sino en el PARA QUÉ y en él COMO HACER, para lo cual es necesario precisar nuestra fuente doctrinaria y algunas breves consideraciones sobre el contexto actual.
Somos herederos de aquella heroica gesta de la Reforma Universitaria, cuya explosión detonó en Córdoba y fue recorriendo las Américas como un torbellino de libertad, justicia y compromiso con la igualdad. Su Manifiesto Liminar, del 21 de junio de 1918, constituye, sin lugar a dudas, uno de los más bellos y poderosos documentos políticos del siglo XX. Una fuente de inspiración intelectual y de energía militante que acompañó a cada una de las generaciones que, desde entonces, asumieron que la lucha por la universidad pública y la lucha por la justicia social son indivisibles, inevitables e impostergables.
Para quienes adherimos a los principios reformistas la educación superior es un derecho de los pueblos, una obligación para los gobiernos y una necesidad estratégica de los Estados en América Latina.
Por ello coincidimos con Guillermo Jaim Etcheverry cuando afirma:
“la universidad tiene la función irrenunciable de cultivar y proponer hacia afuera ciertos valores que le son propios. Su misión hoy es civilizar el nuevo milenio y, para lograrlo, es preciso que emprendamos un esfuerzo destinado a convencer a la sociedad de que la educación encierra valores propios y que no es solo la clave de valores económicos. Debemos reconocer que la Argentina está lejos de asignar ese papel de liderazgo a sus instituciones de educación superior. Ello se pone claramente de manifiesto en la magnitud de los fondos que el Estado asigna para su funcionamiento. Si bien es evidente que en los últimos tiempos se advierte una clara y auspiciosa preocupación por incrementar el apoyo a la ciencia y a la educación en todos sus niveles, debemos convencer a la sociedad argentina de que resulta preciso animarse a dar un osado salto hacia el futuro, duplicando o triplicando la inversión educativa, como lo han hecho los pueblos que avanzan. La gravedad de nuestra situación queda demostrada con elocuencia por la comprobación de que una sola universidad del Brasil, la de San Pablo, recibe del Estado un presupuesto que representa la mitad del que la Argentina asigna a sus 38 universidades nacionales.”
Lo expresó muy bien el escritor Luis Britto García cuando afirmó: “El lugar que una sociedad asigna a sus universidades coincide misteriosamente con el que esa sociedad ocupa en el mundo.”
Ratifico mi compromiso esencial que expuse en mi primer decanato y como estudiante, graduado y docente. “La defensa y promoción permanente de la Universidad pública, democrática, gratuita, de alto nivel académico, científica y al servicio de los intereses del pueblo argentino, propugnando un modelo de país productivo y con justicia social. Una universidad que interactúe con el sector privado y el Estado, generando un ambiente propicio para los procesos de innovación científica y tecnológica necesarios para el desarrollo sustentable del país”.
Respecto COMO HACER ratifico los principios rectores de mi gestión anterior, a saber:
ü Establecer una sana, eficiente y transparente administración.
ü Que los Claustros amplíen su protagonismo en la vida de la Facultad, con una justa, equilibrada y activa participación.
ü Establecer reglas claras, las que deberán mantenerse en el transcurso del tiempo.
ü Aplicar a todos los integrantes de nuestra Casa y en igualdad de condiciones, las leyes, reglamentos y resoluciones, independientemente de jerarquías.
ü Exigir y otorgar suficientes garantías sobre las conductas públicas y privadas de todos aquellos que lleguen a formar parte del gobierno de la Facultad.
ü Realizar el máximo esfuerzo necesario a fin de lograr una buena relación de la Facultad con todas las Instituciones del medio, especialmente las educativas y particularmente con la Universidades de la región, con quien debemos complementarnos y no competir.
ü Mantener la cultura del trabajo y el esfuerzo. En mi gestión todo aquel que perciba un salario será por funciones específicas.
ü Respetar todas las ideas, posiciones y puntos de vista diferentes a los nuestros que tienen derecho intrínseco en la Universidad a ser escuchadas.
ü Proceder en todos los casos con suma prudencia y a la vez en forma enérgica y expeditiva puesto que los problemas deben resolverse, no postergarse.
A los estudiantes que me apoyaron mayoritariamente les cito textualmente el Manifiesto Liminar de la Reforma: “Ante los jóvenes no se hace mérito adulando o comprando. Hay que dejar que ellos mismos elijan sus maestros y directores, seguros de que el acierto ha de coronar sus determinaciones. En adelante, sólo podrán ser maestros en la futura república universitaria los verdaderos constructores de almas, los creadores de verdad, de belleza y de bien”.
Recuerden como dice el Talmud que,” El futuro del mundo pende del aliento de los niños que van a la escuela”. Cuanto más, entonces depende nuestro futuro de ustedes. Son la razón de ser de la Universidad asuman responsablemente el protagonismo que les corresponde.
A mis colegas graduados, que me apoyaron casi por unanimidad, les prometo profundizar los vínculos efectivos y permanentes con la Universidad, fomentando las actividades profesionales, académicas, científicas, culturales, sociales y políticas que sean de su interés.
Por su independencia e inserción social son un claustro fundamental de la vida universitaria Les solicito el esfuerzo de siempre aportando constructivamente ideas y proyectos, garantizando la transparencia en el accionar de las autoridades mediante un férreo control de gestión tanto académico como administrativo, constituyéndose en el equilibrio necesario entre docentes, alumnos y no docentes.
A los no docentes los convoco al trabajo fecundo, creativo y comprometido con la institución.
Soy un trabajador y respeto los derechos adquiridos.
Dignifiquemos nuestras tareas cumpliendo sin excusas y a rajatabla nuestras obligaciones.
A mis compañeros docentes, que como tal conozco su realidad cotidiana, valoro su esfuerzo y los insto a un esfuerzo mayor para su propia capacitación con el apoyo de la Facultad. Recordando que no solo transmiten un saber académico o científico sino que forman además de profesionales, personas y ciudadanos, por lo tanto se constituyen en ejemplos y deben formar en valores y principios.
Y haz como Ortega y Gassett “Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas”.
A todos los claustros, especialmente a los señores directores de departamento electos, a partir de ahora en funciones, les solicito no por una gestión de gobierno sino por objetivos institucionales, establecer y cumplir el cronograma de tareas para llevar a buen puerto el proceso de acreditación de carreras en Civil, Mecánica, Eléctrica y Electrónica que requiere un gran compromiso de cada uno de nosotros.
Anteriormente superamos exitosamente este proceso de evaluación y confío plenamente que con el aporte de la comunidad universitaria y el liderazgo de los señores directores de Departamento, obtendremos el mismo resultado ampliamente positivo que la carrera de Ingeniería en Sistemas de Información.
Agradezco a todos los apoyos recibidos y cumpliré estrictamente los compromisos asumidos pero pensando siempre en lo mejor para nuestra universidad.
Manifiesto que tengo las manos absolutamente libres para actuar sin condicionamientos sectoriales o de grupo y quienes desempeñen funciones, de la índole que fueran, lo harán por sus méritos y capacidades reconocidas.
Deseo expresar mi público agradecimiento al Rector por su excelente predisposición para con nuestra Facultad y el reconocimiento a nuestro trabajo.
Es de estricta justicia, agradecer públicamente a los ingenieros Zalduendo y Alascio quienes cesan en sus funciones como directores de departamento. Gracias por su esfuerzo y entrega por engrandecer nuestra Facultad. Gracias por todos y cada uno de los estudiantes que contribuyeron a formar. En carácter estrictamente personal gracias por su colaboración, sepan que las puertas de la Facultad permanecen abiertas y que pueden sostener con alegría ¡¡¡¡¡“Tarea cumplida”!!!!!.
Se llevan con ustedes el respeto, el cariño y el afecto de nuestra comunidad universitaria.
También es de estricta justicia agradecer al equipo de trabajo que me acompañó durante el primer mandato, especialmente a los que alejan de estas funciones, pero que siempre tendrán mi reconocimiento por la tarea desempeñada y la lealtad demostrada.
Para los que continúan le pido el mayor esfuerzo y dedicación, sabedores que los obstáculos son las cosas que aparecen cuando dejamos de trabajar y pensar en los objetivos. Debemos preservar el clima de concordia y a la vez estimular el pensamiento crítico sobre bases éticas y racionales donde la producción académica, científica y los bienes culturales encuentren terreno fértil para propagarse. Este es un valor intangible que se respira a diario en nuestra Facultad y constituye la garantía de nuestro crecimiento constante haciendo honor a la tradición universitaria de pluralismo y respeto a la opinión diversa.
Ustedes me conocen. Saben cómo pienso y actúo. En la universidad la búsqueda de la verdad es el norte permanente y no hay lugar, ni debe haberlo para la simulación o el engaño.
Por eso es necesario citar aquella frase que algunos atribuyen al filosofo estoico pre cristiano griego Lucio Anneo Séneca, adoptada por la militancia progresista como la muestra acabada de la coherencia basada en hechos concretos y enunciada por el filosofo humanista Martin Buber como remedio para evitar los conflictos humanos, al decir:”Existen tres principios en la vida del hombre: el del pensamiento, el del habla y el de la acción. El origen de todo conflicto, es no decir lo que se piensa y no hacer lo que se dice”.
Esa es mi promesa decir lo que se piensa y hacer lo que se dice.
Nuevamente gracias y espero que entre todos podamos hacer más grande a la Universidad Tecnológica Nacional para engrandecer la Nación y contribuir activamente al progreso social y material de nuestro pueblo.
"LOS DOLORES QUE QUEDAN SON LAS LIBERTADES QUE FALTAN"